lunes, 6 de febrero de 2012

Guerra de coches: Ford Mustang GT vs Chevrolet Camaro

Esta vez subimos al ring a dos muscle cars que hacen todavía historia. Claro, que no todos nosotros tenemos ni deseamos comprarnos uno de estos ni pronto, ni quizás nunca, pero los motores de grandes desplazamientos son un plato fuerte por más híbridos, eléctricos, ER-EV y otras siglas que nos quieran imponer. El último Ford Mustang GT cuenta con el regreso de uno de los motores V8 más famosos, el 5.0, de 412 HP. El Camaro ofrece un poco más de potencia y un poco más de cubicaje, con 426 caballos. Vamos a ver qué ofrecen estos dos viejitos rejuvenecidos para los amantes de los V8 de hoy.





De medidas, es un poco más largo el Camaro, aunque de ancho ambos coches son casi iguales. Digamos que los dos no son exactamente lo que se diría cómodos para cambios de carril rápidos en tráfico denso, pero una vez que te acostumbras a coches de este tamaño, no notas mucha diferencia con otros más pequeños y menos potentes.
Para la conducción de todos los días, ambos tienen torque más que suficiente, aproximadamente a las 4.200 RPM, de modo que los cambios están óptimamente hechos a unas 3500 RPM para una conducción normal. Para conducción deportiva, el Mustang tira algunas vueltas más, cerca de la línea roja y está limitado a 6.500 RPM, una marca muy buena por ser un V8 de calle. Afortunadamente, los cambios manuales de 6 marchas se han puesto como equipo de norma en ambos coches, por lo que si quieres la comodidad de un automático, habrá que pagar más. Los que disfrutaríamos el cambio manual con uno de estos bichos, agradecidos.
Ahora pasamos a las cifras. El Mustang ofrece unas prestaciones mucho más que aceptables y comparado con otros coches que supuestamente son más avanzados sale bien parado. Recuerdo haber leído en algún lado una comparación directa con el BMW M3 en donde le hacía frente más que dignamente con una aceleración de 0 a 100 casi similar. Con respecto al Camaro, el Mustang es unas décimas más rápido que el coche de GM. En donde sí gana el Camaro es en velocidad máxima, ya que llega a los 250 km/h.

Por lo demás la contienda entre ellos está muy pareja. Pero hay que elegir a uno. Después de mucho pensármelo, he decidido quedarme con el Camaro. Es un rediseño prácticamente nuevo, contrariamente al Mustang, es un coche un poco más liviano, tiene el motor más grande (aunque no necesariamente eso sea una gran ventaja), una disponibilidad gigantesca de accesorios y un aspecto exterior muy logrado. Siempre he estado a favor del Mustang, pero es hora de darle al Camaro su oportunidad.


3 comentarios:

  1. la verdad me parece muy interesante el articulo y la informacion que brinda es muy completa y detallada, ni hablar de las imagenes muy buen post

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  2. esta chevere ese camaro mi llave de la U lo tiene en blanco pero los panas aduaneros no se lo aflojan pilas.

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